Libros

Las páginas finales no tienen que ser creadas por separado, están ya incluidas en el cómputo de páginas. Una página final delantera y una página final trasera.

No, el interior de las páginas de portada no puede ser impreso por motivos de producción. No obstante, te ofrecemos la impresión de la denominada sobrecubierta, que también puede ser refinada. Esta portada suelta se coloca alrededor del libro y envuelve los bordes frontales de la cubierta.

La tapa blanda para libros se elabora con cartón de tapa blanda de 275 g/m². La tapa dura está elaborada con cartón de archivador de 2 mm de grosor cubierto con papel de impresión fotográfico de 150 g/m². El papel de impresión fotográfico se refina con acabado en plastificado, el cual puede ser mate, mate y resistente a arañazos o brillante. Además, un papel offset con un grosor de 120 g/m² se aplica al frente y al reverso.

Una portada a color es un tipo de tapa dura con estructura de lino. Para conseguir este efecto, se utiliza cartón de archivador con 2 mm de grosor, el cual está revestido con una cubierta típica de lino. Puedes elegir entre diferentes colores para la portada de lino. Adicionalmente, la estructura de lino puede ser refinada con estampación de lámina en caliente.

La cabezada de poliéster cierra el espacio entre la lomo y el bloque de páginas que forman el libro cuando éste está cerrado y visualmente realza el libro. Está encolado a los bordes superior e inferior de la lomo y por ello protege el libro del polvo y lo dota de resistencia. Si un libro cuenta con cabezada, es posible añadir una cinta (también denominado marcapáginas) a una lomo a partir de un grosor mínimo de 10 mm.

Para libros encolados con tapa dura, es posible encargar cabezada y marcador encuadernado entre los siguientes gramajes y número de páginas:

• Papel offset de 80 g/m² - 152 páginas
• Papel offset de 90 g/m² - 140 páginas
• Papel de libro de 80 g/m², sin fibras de madera - 160 páginas
• Papel de libro de 90 g/m², sin fibras de madera - 120 páginas
• Papel de impresión fotográfica de 115 g/m² - 168 páginas

El papel de libro (o papel de publicación) es particularmente adecuado para la impresión de tipografía. Este nombre se da gracias a que es el tipo de papel clásico comúnmente utilizado en libros. Luce más “abultado” que el papel de impresión fotográfico y tiene la ventaja de no ser reflectante gracias a su superficie mate. El papel de impresión sólo se ofrece para la encuadernación en encolado.

La tapa dura dota a tu libro de una apariencia exclusiva, ofrece una protección respecto a su forma y principalmente se utiliza para obras extensas. Los libros de tapa blanda son normalmente las clásicas publicaciones “de bolsillo”. Gracias a su portada de papel flexible, son más ligeros que los libros de tapa dura y además, son ideales como compañeros de viaje, por ejemplo.

Sí, podemos imprimir libros en pequeñas ediciones a partir de 1 unidad.

La encuadernación con encolado combina las páginas en un bloque de páginas y las encuaderna aplicando un adhesivo especial de poliuretano a la lomo del bloque. La costura de fijación utiliza un hilo de encuadernación para libros para coser las hojas impresas en cuadernillos individuales después del plegado. Estos son posteriormente sellados en la lomo del libro con una capa de adhesivo de poliuretano. Si un libro se utiliza de forma intensa y quiere mantener una condición óptima después de varios años, el encuadernado cosido de alta calidad es lo más recomendable. Esta opción tiene la ventaja de que las páginas dobles permanecen pulidamente abiertas y que el libro en conjunto ofrece una imagen de exclusividad. Sin embargo, los libros con la encuadernación encolada también son de muy alta calidad. Adicionalmente, la cabezada y el marcador encuadernado pueden ser encargados para la encuadernación encolada, si el número de páginas supera un número determinado.